En esta obra el cliente quería incorporar a su vivienda, no una pérgola bioclimática, sino dos pérgolas bioclimáticas diferentes en la misma casa ubicada en Ribarroja del Turia. Una apoyada con apoyos mixtos, es decir, en la fachada de la casa y sus pilares sobre muros bajos y la otra apoyada solo en la fachada de la vivienda, suspendida con tirantes (volada) sin pilares de apoyo.

De esta forma amplía las posibilidades de uso y aprovechamiento de los espacios subutilizados de las áreas externas de la vivienda como lo es la zona de la piscina, así como la zona donde desemboca la escalera de acceso externo a la vivienda. Hay que reconocer que en este espacio recuperado y revitalizado, gracias a la pérgola bioclimática, la tarima flotante, el revestimiento de la fachada con la misma tarima, más las cortinas de cristal y la implementación de WindScreen en todo el perímetro de la misma, convierten este espacio en una zona superíntima y acogedora. Cabe destacar que ambas pérgolas bioclimáticas, están dotadas con tecnología climática como sensores de viento, temperatura y humedad que la activa y desactiva automáticamente al menor cambio del tiempo, así como también de un mando a distancia para su total control.